Hacer dieta en verano.
Las vacaciones parecen no ser el mejor momento para perder peso. Siempre pensamos que es la época de disfrutar y de darnos ciertos caprichos. Pero hacerlo no es incompatible con cuidarse e incluso adelgazar. Te contamos cómo.
¿Quién no ha hecho dieta alguna vez en su vida? aproximadamente un tercio de las personas con obesidad o sobrepeso ha probado alguna dieta. Los meses previos al verano son terreno abonado para la pérdida de peso, a veces con la llamada “operación bikini” y con estrategias que pueden ser peligrosas y tener consecuencias para la salud.
Como ya hemos mencionado en alguna ocasión, lo ideal no es hacer una dieta agresiva y luego recuperar el peso en verano, con el consabido efecto yo-yo. Es mucho más efectivo cambiar nuestros hábitos y cuidarnos durante todo el año.
Alimentos de temporada.
Con el calor, son más apetecibles preparaciones frescas y ricas en agua. Entre otras, podemos acceder a los siguientes:
- Frutas: aguacate, sandía, melón, melocotón y su familia, frambuesas, higos o mango. La fruta, aunque pueda parecer muy rica en azúcares es, sin embargo, muy saciante gracias a su contenido en fibra. Además, es muy refrescante por el agua que contiene. Es el postre ideal, o para picar entre horas. Son ricas además en vitamina C y en carotenos, que ayudan a cuidar nuestra piel en verano.
- Verduras de temporada: tomate, cebolla, judías verdes, zanahorias, calabaza, pepino, o pimiento. Son ricas en fibra, minerales y vitaminas como los folatos, y los carotenos. Además, las verduras también aportan otros antioxidantes, como el licopeno del tomate o la vitamina E, muy importantes para la piel. Preparaciones como ensaladas, cremas frías, gazpacho o salmorejo, son saludables, refrescantes y saciantes, y nos ayudarán a mantener la línea.
- Pescados: en esta época podemos encontrar pescado azul como atún, caballa, jurel o sardina, además de bacalao, rape, merluza o lenguado. Son ricos en omega-3 de cadena larga, que también nos ayudarán a mantener la piel saludable frente al sol.
Dieta personalizada.
Además de poder disfrutar de todas las frutas y verduras refrescantes que podemos encontrar en verano, y que nos ayudarán a cuidar la línea, podemos dar un paso más. Sabemos, gracias a la genética, que no todo el mundo tiene la misma respuesta a distintas dietas.
Mientras que algunos pierden más peso con dietas bajas en grasas, otros lo hacen con dietas bajas en carbohidratos. Y algunas funcionan mejor con dietas algo más altas en proteínas. Adicionalmente, restringir azúcares, grasas saturadas o aumentar la ingesta de fibra dietética, además del ejercicio, pueden favorecer más o menos la pérdida de peso, en función de la genética personal. El nuevo test GoGood Diet, analiza estos factores y, en función a tu perfil genético, puede ayudarte a personalizar tu dieta
Por todo lo anterior, el verano puede ser un momento estupendo para plantearse un cambio de hábitos duradero. Disfrutar de todas las opciones que nos dan las frutas y verduras de temporada, personalizar tu dieta con el test genético GoGood Diet y la ayuda de un dietista-nutricionista (el test GoGood Diet incluye una primera consulta gratuita para interpretar tus resultados).
Destacados:
Las frutas y verduras de verano son apetecibles y ayudan a mantener la línea.
Ensaladas, gazpachos y salmorejos, refrescantes y saludables.
Una dieta personalizada según tu genética, será más efectiva.
Palabras clave:
Dieta, verano, peso, adelgazar, salud.
