Los test genéticos son una nueva herramienta que permite acercarse a la nutrición personalizada. La consulta en nutrición además de poder tener en cuenta el perfil del paciente en cuanto a historial de salud, hábitos y preferencias, ahora tiene, gracias a estos test, la posibilidad de ajustar parámetros nutricionales a la biología del paciente.
El profesional de la nutrición (dietista-nutricionista) debe dar respuesta a multitud de variables cuando se sienta delante de un paciente. Desde el objetivo de salud (pérdida de peso, tratamiento dietoterápico de alguna enfermedad) debe definir una estrategia que permita alcanzar ese objetivo de forma óptima.
Para ello, deberá tener en cuenta aspectos como el historial de salud y estado actual del paciente, tratamiento farmacológico si lo hay, sus hábitos (laborales, familiares, deportivos) sus preferencias, y sus motivaciones. Todo ello va a ser información que puede orientar la metodología del tratamiento nutricional en un sentido o en otro.
Se puede conseguir por ejemplo la pérdida de peso con muchos métodos diferentes, pero la clave está en encontrar la forma que le resulte más llevadera al paciente, para mejorar su adherencia o seguimiento a la pauta.
Nutrición de precisión.
Se habla mucho en los últimos años de la llamada medicina de precisión, es decir, aquella que tiene en cuenta la biología del paciente para poder ajustar tanto diagnóstico como tratamiento a la genética personal. Por ejemplo, gracias a los avances en farmacogenética es posible ajustar la dosis o el tipo de fármaco para un paciente concreto, en función de su respuesta metabólica ante el mismo. No todos los fármacos son igual de efectivos en todas las personas.
La nutrigenética y nutrigenómica han permitido en paralelo, avanzar en la comprensión de la interacción entre genes y nutrientes, y su efecto sobre la salud. En este sentido, los test genéticos aportan ya a día de hoy información que puede ser aplicada directamente por el dietista-nutricionista para ajustar el tratamiento nutricional.
Los test genéticos permiten que el nutricionista personalice la dieta.
¿Funcionará esta dieta con este paciente?
Esta es la pregunta del millón. Lógicamente y como hemos comentado, el condicionante número uno del éxito será la adherencia del paciente: la pauta tiene que resultarle fácil, sencilla y atractiva, y sostenible a largo plazo. Pero además de eso, sabemos que distintas opciones en dietoterapia pueden funcionar más o menos eficazmente en algunas personas.
Un ejemplo serían las dietas bajas en carbohidratos o bajas en grasas que, en función del perfil genético y metabólico, pueden ser más o menos efectivas en la pérdida de peso para algunas personas. Gracias a un sencillo test genético como GoGood Diet, el profesional puede ahora conocer si su paciente tendrá más facilidad para perder peso con una u otra aproximación.
La nutrición personalizada ahorra costes y mejora los resultados.
Aplicaciones en dietoterapia.
Otro aspecto que tiene gran importancia para su aplicación en dietoterapia nutricional, es el perfil de absorción, utilización y eliminación de vitaminas y nutrientes como los ácidos grasos omega-3. A nivel poblacional sabemos que aun a pesar de la gran disponibilidad de alimentos en nuestra sociedad, existen carencias en algunas vitaminas. Un ejemplo sería el folato, del que los estudios muestran que la mayor parte de la población española no alcanza las ingestas recomendadas.
Esto es especialmente preocupante para aquellas personas que pueden tener unos requerimientos más elevados de algunas vitaminas. Se sabe que, en función de ciertas variantes genéticas, las ingestas recomendadas pueden aumentar respecto a los valores generales. Test como GoGod Vital permiten ajustar las ingestas aumentando el aporte para aquellas vitaminas donde el perfil genético muestre un requerimiento por encima de lo normal.
Un test de intolerancias fiable.
En los últimos años se ha visto una explosión en la disponibilidad de los llamados test de intolerancias alimentarias, de lo más variopinto, y por lo general con técnicas nada fiables ni basadas en la evidencia científica, con fraudes por desgracia muy extendidos.
Los test genéticos permiten sin embargo establecer de forma precisa y fiable si podemos padecer una intolerancia alimentaria. En concreto, GoGood Intolerance determina esta circunstancia para gluten (celiaquía), fructosa y lactosa. Si bien en algunos casos como en la celiaquía pueden ser necesarias pruebas adicionales para el diagnóstico según el protocolo establecido, este test tiene una fiabilidad total en cuanto a sus resultados.
Estas intolerancias pueden ser causa de molestias digestivas en un buen número de pacientes, por lo que el cribado con este sencillo test puede ayudar al profesional a descartar estas causas.
Optimizando el rendimiento.
La nutrición deportiva es otro de los campos donde la personalización es clave. Tanto las pautas de entrenamiento y descanso, como las ingestas, han de estar perfectamente controladas en función del momento de la temporada, entrenamiento o competición.
El entrenamiento también se puede beneficiar de estos test.
Los test genéticos como GoGood Sport pueden ayudar tanto al nutricionista como al entrenador a personalizar las pautas tanto de suplementación deportiva y alimentación, como de entrenamiento. Se ha visto como la aplicación de estas estrategias puede mejorar los resultados de forma muy significativa.
En resumen, los test genéticos son otra herramienta más en el conjunto de recursos que el nutricionista puede utilizar en su consulta. Gracias a ellos ahora es posible mejorar el resultado de las intervenciones nutricionales y ahorrar tiempo y costes gracias a un mejor diagnóstico y la aplicación de terapias más efectivas.
