Omega-3: vital para tu salud

Salmón

Estudio tras estudio, se pone de manifiesto que, al menos un 60% de los españoles, no toma suficientes ácidos grasos omega-3 en su dieta. Estas sustancias, presentes en algunos vegetales y especialmente en el pescado, son de gran importancia para la salud, especialmente cardiovascular. Pero, ¿sabías que esto puede depender de tu genética?

Los ácidos grasos omega-3 se han convertido en una de esas sustancias de nombre extraño, pero que todos conocemos gracias a su inclusión en distintos productos de los llamados funcionales. Estas grasas pertenecen a la familia de las poliinsaturadas, y son consideradas beneficiosas por sus múltiples efectos sobre la salud.

Las grasas omega-3, especialmente las presentes en el pescado, son importantes para una buena salud cardiovascular.

Existen varios tipos de grasas omega-3. Por un lado, las de origen vegetal, en alimentos como las nueces o las semillas de lino, que contienen ácido alfa-linolénico (de forma abreviada, ALA). Por otro, tenemos las llamadas grasas omega-3 de cadena larga, que se encuentran sobre todo en el pescado. Las dos grasas de este tipo más importantes son el  ácido docosahexaenoico o DHA, y el ácido eicosapentaenoico o EPA, para los amigos.

¿Suficiente omega-3?

Las grasas omega-3 son esenciales. Es decir, debemos obtenerlas a partir de los alimentos, porque de lo contrario el cuerpo no es capaz de formarlas. Además, tienen multitud de funciones muy importantes, como mantener la salud cerebral, favorecer la resolución de los procesos inflamatorios y, sobre todo, su vínculo con una buena salud cardiovascular.

Se recomienda una ingesta de omega-3 vegetal de 1,1 gramos en mujeres y 1,6 en hombres. Adicionalmente y debido a su importancia, se aconseja obtener de la dieta entre 250 miligramos y un gramo al día de omega-3 de cadena larga (DHA y EPA). Esto se debe a que, aunque el organismo es capaz de transformar los omega-3 vegetales en omega-3 de cadena larga, esta conversión no es muy eficaz (se estima que menor de un 5%).

 

Pez Omega-3

Ambos necesarios: omega-3 vegetal, en aguacates y nueces; y omega-3 de cadena larga, en salmón y atún.

Además, este proceso de conversión está regulado por un gen denominado FADS1, que presenta una mayor o menor actividad en algunas personas. El test genético GoGood Vital analiza esta variación genética para determinar si las necesidades de omega-3 de cadena larga pueden estar aumentadas.

Salud cardiovascular

Las grasas omega-3 participan en la prevención de la enfermedad cardiovascular, ya que contribuyen a mejorar la función cardiaca, controlar la presión arterial, a modular la inflamación, y a mantener a raya los niveles de triglicéridos. De nuevo, y dependiendo de variantes genéticas en los genes NOS3 y APOA5, puede haber mayor o menor sensibilidad de los niveles de triglicéridos en sangre en caso de no tomar suficiente omega-3. Analizando estas diferencias y combinando el resultado con el gen mencionado anteriormente (gen FADS1), el test genético GoGood Vital permite establecer de forma personalizada una recomendación de ingesta de omega-3.

Podemos convertir el omega-3 vegetal en omega-3 activo, pero la genética individual influye en este proceso.

Por ejemplo, en el caso de que tengamos la variante poco eficaz del gen FADS1, que convierte el omega-3 vegetal en omega-3 activo, y que además tengamos una alta sensibilidad de los niveles de triglicéridos frente a la deficiencia de omega-3, podríamos pasar de una recomendación general de 1.000 miligramos al día, a entre 2.000 a 3.000 miligramos al día.

 

Cálculo de Omega-3

En este caso, comer pescado con mayor frecuencia que la recomendación general de dos veces por semana sería una estrategia para poder obtener la cantidad personalizada de omega-3. Si fuera necesario, podría pautarse suplementación, si bien es recomendable el consejo de un dietista-nutricionista que pueda asesorarnos para personalizar nuestra alimentación.

Los niveles de triglicéridos son sensibles a la cantidad de omega-3 que ingerimos, según nuestra genética.

Es muy sensato seguir las recomendaciones generales de ingesta de vitaminas o de omega-3, pero no todos somos iguales, y gracias a la nutrigenética ahora podemos personalizar nuestra dieta, para así optimizar nuestra salud.

 

Omega-3

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