¿Cómo ayuda la nutrigenómica a tu salud?

¿Personalizar tu alimentación según tus genes? Esa es la idea que persigue la ciencia de la Nutrigenómica y que está consiguiendo que vivir más y mejor sea posible a través de la alimentación y un test genético.

La determinación de la estructura del ADN por James Watson y Francis Crick en 1953, fue sin lugar a dudas uno de los descubrimientos clave del siglo XX, descubrimiento por el cual recibieron el Premio Nobel de Medicina en 1962. Unos años después, ya en este siglo XXI, se consiguió obtener la información completa (en forma de letras dentro del ADN) del genoma humano completo. Conocer la información contenida en nuestro genoma nos permite estudiar la relación que existe entre el ADN y la salud, desde diferentes puntos de vista, tales como las enfermedades hereditarias, el efecto del estilo de vida sobre la salud, o la interacción entre alimentación y genes.

La nutrición es uno de los campos que ha avanzado de la mano de la genética, de cuya colaboración surgieron dos nuevas ramas de conocimiento: la nutrigenómica y la nutrigenética. La nutrigenómica se centra en cómo afectan los alimentos a nuestro ADN al activar o desactivar la acción de ciertos genes, lo que puede tener efectos considerables en nuestra salud.

Por ejemplo, cuando tomamos azúcar, la glucosa que contiene activa el gen de la insulina, lo cual permite así mantener unos niveles glicémicos adecuados. Si la efectividad de esta activación se viera afectada, aparece la diabetes. Por otra parte, la nutrigenética estudia cómo las diferencias genéticas individuales pueden afectar a la manera en que cada uno de nosotros absorbemos y aprovechamos los distintos nutrientes contenidos en los alimentos. De tal manera que una variante “A” contenida en un gen relacionado con la eficiencia a la hora de obtener vitamina A de los alimentos puede modificar nuestros requerimientos nutricionales para evitar deficiencias de dicha vitamina. Puedes consultar éste y otros términos en este glosario.

Los genes cargan la pistola, pero los hábitos aprietan el gatillo

Recientemente se ha podido comprobar que lo que más afecta a nuestra salud es la interacción entre el genoma y el estilo de vida, es decir, la manera en que nuestra predisposición genética a enfermedades se ve afectada por el ambiente en el que vivimos: los genes cargan la pistola, pero los hábitos aprietan el gatillo. Esto quiere decir que podemos tener más facilidad para ganar peso con una mala alimentación según la variante de un gen denominado FTO. Pero el riesgo a obesidad proporcionado por dicha variante queda anulado si seguimos un estilo de vida adecuado que incluya una alimentación equilibrada. Es por tanto de gran interés conocer nuestra genética individual para poder realizar recomendaciones que nos permitan vivir más y mejor: este es el ámbito de actuación de la nutrigenómica.

Adaptar tu dieta a tus genes va a resultar en un funcionamiento óptimo de tu organismo

La nutrigenética también puede ayudarnos a la hora de determinar nuestras necesidades de nutrientes esenciales, como los ácidos grasos omega-3, o de vitaminas. Si disponemos de nuestra información genética se puede por tanto personalizar las recomendaciones de ingesta, incluso por encima de las cantidades medias recomendadas para la población general, para maximizar los efectos positivos de nuestro genoma en nuestra salud.

Esto puede ser crucial no solo durante toda nuestra vida, sino en momentos como el embarazo, donde las necesidades de algunos nutrientes como el folato son críticos para evitar malformaciones congénitas. Independientemente de que el protocolo habitual sea la suplementación, conocer ciertas características genéticas de la madre puede permitir ajustar la dosis de ácido fólico, y además hacerlo con uno u otro tipo de suplementos.

En definitiva, gracias a la nutrigenómica y la nutrigenética, pasamos de la era de las recomendaciones generalizadas, a la de la nutrición personalizada e individualizada, con el objeto de ajustar nuestras necesidades nutricionales individuales para vivir más y mejor.

2 comentarios en “¿Cómo ayuda la nutrigenómica a tu salud?

  1. ¡Muy buen artículo! De veras, he estado leyendo tu blog y creo que compartes un buen contenido de calidad. Me sorprende que no tengas más comentarios, buen trabajo.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.